Peña Esclusa explica por qué “apareció” en la rueda de prensa de Interpol

Bogotá, 16 de mayo.- La reacción desesperada del chavismo frente a la sencilla pregunta que hice en la rueda de prensa de Interpol, realizada ayer en esta ciudad, demuestra lo que toda Venezuela ya sabe: que Chávez es hombre de las FARC. Los hechos son los siguientes:
Desde el 2007 soy corresponsal en Venezuela y Colombia del diario argentino La Nueva Provincia, fundado hace más de cien años. Esto no debería causar sorpresa, porque -a pesar de ser ingeniero- soy columnista de periódicos nacionales e internacionales desde hace más de veinte años. Además, he escrito cinco libros, dos de los cuales han sido traducidos a otros idiomas. Es cierto que, me dedico a la política, al igual que muchos chavistas que conducen programas de opinión, incluyendo al propio Chávez.
Mi aparición en la rueda de prensa de Interpol no es ni sospechosa, ni extraña. La información contenida en la computadora de Raúl Reyes viene a confirmar lo que vengo diciendo públicamente desde el año 1995: que Chávez es hombre de las FARC. Así que mi interés en el tema está plenamente justificado.
Jamás he pertenecido al TFP [ Nota de N24: se refiere al grupo “Tradición, Familia y Propiedad” ], como alega el Gobierno. Más que descabellada, es risible la acusación que me hace el oficialismo de haber atentado contra el Papa Juan Pablo II. De ser cierto, no me habría recibido el año pasado en el Vaticano el Cardenal Renato Martino, Prefecto de la Comisión Justicia y Paz; ni habría escrito un libro titulado El Continente de la Esperanza, en honor a Juan Pablo II. Sería un paría, como lo es Alí Ahmed Agca.
Tampoco comulgo -ni jamás he comulgado- con el fascismo; tampoco respaldo dictaduras, ni de izquierda -como la de Chávez y Fidel Castro- ni de derecha.
Pero como el Gobierno no ha encontrado ni una mancha oscura en mi pasado, no le queda otro remedio que calumniarme, inventando los cuentos más inverosímiles.
Lo importante de la rueda de prensa de ayer no fue mi presencia, sino las declaraciones del Jefe de Interpol, que demuestran sin lugar a dudas la vinculación del oficialismo con el narcoterrorismo colombiano.
El escándalo en mi contra, desatado a través de los canales oficiales, es una simple cortina de humo para encubrir lo obvio: criminales vinculados al narcoterrorismo no pueden seguir ejerciendo cargos públicos, no importa cuán altos sean sus cargos. Están asustados y la pagan conmigo, pero eso no los librará del castigo que les espera.
Alejandro Peña Esclusa