“No soy tu capital querida, ahora soy tu capital herida”.

“No soy tu capital querida, ahora soy tu capital herida”.

Hoy me trasladé a Sucre en la “La Nave de mis Sueños” que me lleva a recorrer muchas ciudades del país y del mundo; como adivinarán mis lectores este viaje lo hice porque hoy celebramos todos el 199 aniversario del grito libertario lanzado en dicha ciudad el 25 de Mayo de 1809.Al llegar al aeropuerto y bajar de mi avión no pude menos que exclamar emocionado: He venido a besarte mi capital querida, y el eco de los cerros me respondió: “No soy tu capital querida, ahora soy tu capital herida”.Siguiendo mi costumbre me dirigí hasta la pensión que me acogió muchas veces cuando estuve en la capital de los Charcas durante el desarrollo de la Asamblea Constituyente donde los masistas hicieron lo que les vino en gana, se olvidaron de los dos tercios, trasladaron la sede del Teatro Gran Mariscal a un Cuartel militar y luego a la ciudad de Oruro, donde entre gallos y medianoche aprobaron una Constitución trucha que ni siquiera leyeron levantando sus manos.La gerente-propietaria de la Pensión, entreabrió tímidamente la puerta de su casa de huéspedes y me dijo alborozada; “Pase don Paulino Huanca, creí que habían vuelto a Sucre los SS (Sectores Sociales)”.Me contó que después de mi retorno a La Paz, cuando la Asamblea Constituyente se había trasladado al Instituto Militar de La Glorieta se produjeron los choques armados que dejaron como saldo a tres chuquisaqueños muertos y 300 heridos, lo que dejó herida a la capital.Al salir a pasear por las calles de Sucre, unas cholitas chuquisaqueñas me reconocieron y una de ellas dijo: “Había vuelto Don Paulino, ahora sí que bailaremos y tomaremos chicha y le invitaremos “mondongo” y también nuestro famoso Coko”. Allí nos fuimos y bailamos unas cuecas y unos bailecitos que me parecieron resabios de un minué, explicándome un experto caballero sucrense que el “coko” que me invitaron es la réplica chuquisaqueña al “coq au vin” que inventaron los franceses cociendo al pollo en vino; en Sucre hicieron cocer el vino en chicha con abundante ají.En lo mejor de la jarana criolla ofrecí a mis amigos chuquisaqueños la construcción de un nuevo aeropuerto, la conclusión de la ruta “Jaime Mendoza”, la ampliación del Estadio Patria para la realización de los Juegos Bolivarianos en la Capital, además de un monumento a Don Mamerto Urriolagoitia por su valor ciudadano y su sombrero verde. Les prometí todo; hasta romper la indiferencia gubernamental del presidente Evo y sus ministros por Chuquisaca y su Capital Herida.
PAULOVICH