La PERDIDA DE LA DIGNIDAD boliviana - SE VIO - en la Cumbre de Chile
Una cámara de TV instalada en el lobby del Espacio Riesco, el centro de convenciones donde se desarrolló la XVII Cumbre Iberoamericana, permitió que el público apreciara la actitud del presidente boliviano, Evo Morales, ante el resto de sus colegas. Tras su ingreso al salón, el boliviano fue directo a tomar asiento en una sala de espera solitaria. Poco después se vio cuando se puso de pie para saludar a su colega colombiano Alvaro Uribe. A continuación Uribe lo tomó por un brazo en gesto de cordialmente llevarlo hasta otro lugar. Morales se resistió y prefirió permanecer solo en su sillón. La siguiente toma mostró que tanto Uribe como una decena de presidentes departían en el otro extremo del salón. Fue obvio para los espectadores que Uribe había invitado a Morales a que se sumara al grupo de mandatarios que informalmente hablaban antes de comenzar la sesión de trabajo. Sólo el ingreso de Hugo Chávez a la sala hizo que Morales saliera de su mutismo.
Una cámara de TV instalada en el lobby del Espacio Riesco, el centro de convenciones donde se desarrolló la XVII Cumbre Iberoamericana, permitió que el público apreciara la actitud del presidente boliviano, Evo Morales, ante el resto de sus colegas. Tras su ingreso al salón, el boliviano fue directo a tomar asiento en una sala de espera solitaria. Poco después se vio cuando se puso de pie para saludar a su colega colombiano Alvaro Uribe. A continuación Uribe lo tomó por un brazo en gesto de cordialmente llevarlo hasta otro lugar. Morales se resistió y prefirió permanecer solo en su sillón. La siguiente toma mostró que tanto Uribe como una decena de presidentes departían en el otro extremo del salón. Fue obvio para los espectadores que Uribe había invitado a Morales a que se sumara al grupo de mandatarios que informalmente hablaban antes de comenzar la sesión de trabajo. Sólo el ingreso de Hugo Chávez a la sala hizo que Morales saliera de su mutismo.