El Presidente está asustado. Y el susto, una lengua fácil y alguna dosis de ignorancia son una combinación ideal para obligarnos a escuchar operías. Porque nadie, a estas alturas, podrá poner en duda que la historia de sus compañeros pidiéndole armas era una opería. Y eso de que había leído por ahí que Santa Cruz quiere ser Kosovo, ¿no es un solemne disparate?El Presidente está asustado... ¡y tiene razón!