La Prefectura de Santa Cruz declaró hace dos semanas la alerta amarilla en todo el departamento debido a las constantes lluvias registradas en noviembre. Hace una semana se registró en la provincia Guarayos una precipitación de 24 horas y acumuló 240 mililitros de agua, lo que provocó el anegamiento de sembradíos, destrozo de casas y puentes, por ello se activó la alerta roja.
Callaú dijo que según una evaluación preliminar se contabilizó y rescató del área aproximadamente 200 familias damnificadas. Sin embargo, la cifra aumentará cuando en esta jornada, personal de rescate llegue a las zonas afectadas y verifique que hay más de 530 familias aisladas por el agua y que no pueden salir de sus lugares.