Definitivamente los miembros del gobierno con su embriaguez de poder, hoy están convencidos que son unos seres celestiales puros y cristalinos, que su conducta es ejemplo no solo para los bolivianos sino para el mundo, son una especie de "mormones" que pregonan su palabra pretendiéndonos convencer que Evo es la salvación no de los Aymaras, menos de los Bolivianos, ni de los sudamericanos, sino que es el salvador del mundo, lo señaló alguna vez el Canciller