Nuevamente y como estaba previsto, algunas organizaciones indígenas y campesinas han expresado públicamente su intención de plantear que en la nueva Constitución a redactarse en la Asamblea Constituyente, se les asigne como derecho propietario el territorio donde se asientan, la totalidad de los recursos del suelo, vuelo y subsuelo, en lugar de mantener la actual situación donde los recursos del subsuelo, especialmente minerales e hidrocarburos pertenecen a la Nación Boliviana, a través de su representación jurídico institucional que es el Estado.
Este es un planteamiento que se viene acuñando desde hace mucho tiempo con el apoyo de varias onG que en realidad son las causantes de este intento, no sólo en Bolivia sino en otros países con fuerte presencia indígena.